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9ª Edición Seminarios Científicos

MicrosRNAs y Cáncer

Fecha: 22 de octubre

Hora: 17:00 CEST (Hora en España)

Duración: 1 hora

A mediados del siglo pasado se encontraron evidencias en bacterias y virus de que los ácidos nucleicos y, particularmente el ADN, eran la base material del material genético y se estableció el modelo de la Doble Hélice del ADN. Cunde la idea de que los genes serían fragmentos o secuencias de ADN. Muy pronto después se estableció que la función primaria del gen era la transcripción de su ADN en una molécula complementaria de otro ácido nucleico extraordinariamente parecido al ADN: el llamado ARN mensajero, que después se traducirá a proteínas siguiendo las directrices del código genético (Dogma Central de la Genética Molecular). Los genes (genotipo) eran “recetas” para fabricar proteínas (fenotipo). Pero este tipo de genes, cuyo número actual en la especie humana ronda los 21.000, resultó ser a la postre un tipo minoritario de genes (“codificantes”) que ocupaban en torno al 1% del genoma de los organismos superiores. La presentación del primer borrador del genoma humano en 2001 evidenció la existencia de más de 700 genes diferentes, llamados “no codificantes” porque su función se detiene en la de servir de molde para la síntesis de moléculas de ARN que ya desempeñan una función.

El proyecto ENCODE, posterior al proyecto Genoma Humano, se ha encargado de identificar todos los elementos funcionales que hay en los genomas y ha servido para descubrir una cantidad ingente de genes “no codificantes” que está revolucionado el mundo de la Genética. Entre ellos destacan los microARNs, un tipo de ARNs de pequeño tamaño transcritos a partir de secuencias de ADN no codificante que, sorprendentemente inunda los genomas de plantas, animales e incluso está presente en los virus, y protagoniza un nuevo sistema de regulación de la expresión genética de la inmensa mayoría, sino todos los genes, codificantes. Los microARNs constituyen un mecanismo de control de todos los procesos biológicos desde la diferenciación y el desarrollo hasta cualquier proceso biológico que ocurra en una célula. Funcionan como un ajuste fino de sintonía necesario para la homeostasis celular. Por tanto, no es de extrañar que su desregulación pueda contribuir al desarrollo del cáncer, definiendo una nueva categoría de oncogenes y genes supresores de tumores. El análisis de estos microARNs ha servido para el establecimiento de nuevos protocolos de caracterización tumoral y el desarrollo de nuevas estrategias terapéuticas. Recientemente, se discute si los microARNs presentes en los alimentos (dieta) pueden ser absorbidos por el torrente circulatorio y los diferentes órganos o tejidos donde regularían la expresión de genes endógenos.

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Fecha: 22 de octubre

Hora: 17:00 CEST

(Hora en España)

Ponentes

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Dr. José Fernandez Piqueras 

Catedrático de Genética de la Universidad Autónoma de Madrid

Catedrático de Genética de la Universidad Autónoma de Madrid. Es también Presidente del Comité de Ética de Experimentación Animal del CBMSO y Patrono de la Fundación Severo Ochoa.

MicroRNAs y cáncer

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