Suena una gaita. Es un túnel bastante oscuro en un día de sol radiante, aún con el contraste se vislumbran las camisetas blancas de la expedición. Nieves, Pilar y Ana, sin mediar una palabra, se cogen de la mano. Bajan cinco escalones y giran a la izquierda. Ante ellas la Plaza del Obradoiro. Su meta. La culminación de una aventura que no sólo ha durado seis días en los que …